Nos despedimos el sábado por la noche de Brasil, no dejamos de recordar historias y emociones de estos días tan lindos... Llegamos muy cansadas a Buenos Aires y en casa de Laura volvemos a enfrentarnos a maletas llenas de libros, salimos de madrugada para Córdoba por lo que aprovechamos para ducharnos pero de repente nos encontramos con el baño inundado mientras se duchaba una de nosotras(algún problema con la tubería ha provocado que se salga todo el agua por el baño) intentamos achicar el agua mientras otra seca la ropa mojada y otra coloca los libros…(situación bastante surrealista gente) tenemos algunos momentos de tensión pero conseguimos dejar la casa seca y sin problemas.
El viernes por la mañana en casa de Marilia y Rafael aprovechamos que no tenemos actividades programadas para dedicarnos a organizar cara a Argentina, corregimos las cronicas, enviamos correos para cerrar la programación, compramos billetes para el largo viaje que haremos en guagua de BB.AA a Córdoba etc... Salimos pronto para almorzar en un bar cerca de la Universidad (Aun no estamos acostumbradas a los horarios de aquí... almorzar a las 12!!!!! ).
El Sol nos despierta a las 7 de la mañana en Foz do Iguaçu, comenzamos el día compartiendo sensaciones vividas hasta el momento y tras desayunar con Alessandro y Ana partimos hacia la ciudad de Cascavel, donde nos espera Edenilson (futuro Baladrino) que será nuestro guía durante la visita a uno de los Asentamientos conseguidos tras la ocupación de las tierras. Fueron 5 horas de carretera en las que Alessandro no nos dejo sustituirle al volante, avanzando por grandes terrenos en manos de la agroindustria que aquí hace tanto daño, plantando Soja para exportar fuera del país.
La llegada a Buenos Aires tras casi un día de viaje fue un regalo para nosotras, ya que gracias a esos enredos de tantos años entre baladrinas y compas de ecologistas en acción, se había coordinado la acogida en el piso de una de tantas personas inquietas que nos acogerán para compartir este viaje.