Amanecía el sábado 2, un agosto cálido mas propio del otro hemisferio, con el calor también de las lindas personas que nos rodeaban.... bajo el sol caminamos a radio universitaria donde nos esperaba Julio, quien además del conductor del programa "Maestro de Campo, programa para l@s docentes", es maestro rural en un pueblito tan tan chico que sólo tiene un alumnito (y la escuela sigue abierta, por si alguna administración quiere tomar nota y aprende como se apuesta por la formación), tal vez sea esta soledad semanal la que fomente su amplio hablar y decir... con un fuerte sentido del humor, no solo nos arrancó las risas, sino también nuestros quehaceres mediante una entrevista tertulia, donde él nos muestra la grata sorpresa de que Baladre se mantenga por más de 30 años (conoce la página web y ha visto el vídeo) también estaba Alexandra, con quien, ya os contaremos, visitamos la CUPS, pero eso otro día, seguimos con este...
Recogemos la entrevista que le hicieron en el programa la Grieta Alerta de Radio Bulla a nuestras compas viajeras. Tuvieron la ocasión de hablar de Renta Básica dela Iguales y feminismos, así como de cárcel y mujer.
Estamos en San Luis, una ciudad mediana (350.000 habitantes), gobernada durante 3 décadas por una familia oligarca en la que dos hermanos se han ido alternando el poder y haciendo su feudo particular del territorio, pero no exento de focos de lucha y resistencia que vamos a ir conociendo a lo corto de nuestra estancia aquí. La sierra, a lo lejos, nos anuncian otros paisajes hermosos que rompen con la Pampa, la llanura y el monocultivo envenenado. Gabriel y Luis nos reciben con la generosidad y compañerismo al que nos estamos gratamente habituando. En la mañana hemos aprovechado para estirar un poco las piernas, actualizar las crónicas (este ritmo y la falta de internet nos impide llevarlas al día, sabemos que lo comprendéis), poner en orden los libros y hasta echar una mano en el huerto de Luis.
Nos despedimos de la ciudad de Río Cuarto acompañando a la Asamblea Rio Cuarto sin Agrotóxicos en la acción directa, pacífica y no violenta que iban a realizar en la sesión que el Consejo Deliberante tenía en el recién inaugurado Centro social Ex Matadero.
Entre mate y café, preguntas y risas, fuimos pintando los carteles que sacaríamos en la sesión del Consejo. Nos encontramos a las afueras del centro social y tras los acuerdos previos de donde situarnos y cuando irrumpir entramos en la sala donde se celebraba la reunión. Tras las indicaciones sacamos de forma silenciosa nuestros carteles donde pedíamos explicaciones por la demora en conceder la Banca (concejo abierto) a la asamblea, después de varios minutos y por el revuelo y protestas generado en los organizadores y tras las fotos, salimos del recinto para explicarles a los medios el porqué de la acción.