Como una primera repercusión de su paso por aquí adjunto a este mensaje les envío un afiche que anuncia un seminario sobre el sistema de pensiones al cual me invitaron como ponente; en mi ponencia, como intenta decirlo el título de la misma, mostraré que la lucha de los trabajadores bolivianos no debe circunscribirse a mejorar sus jubilaciones, sino que debe ampliarse e incluir otros objetivos y otras herramientas, como la Rbis; he hecho que pongan entre comillas la Rbis, para dejar en claro que estamos aprendiendo de ustedes, para señalarles que es necesario conocer su experiencia y aprender de la misma.

A propósito de aprender, es necesario que en algún momento discutamos la explotación de los recursos naturales no renovables (minerales e hidrocarburos) como fuente para financiar una Rbis; les adelanto que en Bolivia surgió ese tipo de propuestas el momento de discutir la redistribución de la renta petrolera el año 2005, por supuesto, me opuse a esa alternativa porque fue hecha en el marco de defensa de las transnacionales y un antiestatismo estúpidamente neoliberal, y también porque en mi criterio de ese entonces significaba "despilfarrar" esos recursos; por ello había dado la pelea por crear un Fondo Soberano, cuya principal función sea convertir la riqueza petrolera en "capital productivo" y en "capital financiero", y recién después redistribuir las utilidades de este fondo entre todos los bolivianos.

Ahora que conozco mejor la propuesta suya y que cada vez comparto más, me doy cuenta que poner en el centro de atención la vida de los seres humanos no es un despilfarro, sin embargo, todavía me resisto a aceptar que el dinero proveniente de recursos agotables tenga este fin, más todavía si tomamos en cuenta que ello puede impulsar la más rápida y abusiva explotación de estos recursos, además, con todo el daño ambiental que ello significaría.

Por supuesto que en el contexto boliviano actual igual se está despilfarrando esos recursos. Si bien, una pequeña parte es destinada a las personas mayores de 60 años (Renta Dignidad); la otra parte va a carreteras, escuelas, jardineras, la mayoría mal construidas y mediando corrupción, etc. etc. En este marco, ciertamente es más justo que esos recursos sean entregados a las personas, pero... en el largo plazo ello, evidentemente, no es sostenible.

En este marco, para una posible Rbis en Bolivia seguramente todos miraran como principal fuente de financiamiento a las rentas petrolera y minera, aquí lo más acertado sería plantear otras fuentes de financiamiento (impuestos progresivos, a la banca, etc.) Pero ello todavía deja en pie una interrogante:

¿Acaso el mejor destino para el dinero proveniente de la explotación de recursos naturales es distribuirlos llanamente, no es posible que dé mejores frutos una acertada administración de los mismos? ¿Acaso los fondos que pueden constituirse con estos recursos no son un mecanismo que permiten el mantenimiento de esta riqueza, bajo determinadas condiciones de administración?

Bueno, me gustaría conocer su opinión al respecto y también si conocen otras experiencias o documentos al respecto que pueda estudiar.

Reciban un gran abrazo, Gus