Nuestro equipo, dúo, de acompañamiento por Córdoba capital y sus alrededores (Lucia y Lichi), tenían previsto que el jueves iba a ser un día muy intenso. Tempranito llegaba a nuestra casa de acogida Lucia, con el coche de Laura; nuestra visita le aceleraba el proceso de comenzar a conducir por Córdoba, que os aseguramos que tiene su cosita. Para antes de las once de la mañana ya estábamos camino del pueblo de Las Malvinas, en la ruta 88, a unos 20 km de la gran ciudad. Para darle cosilla al viaje, nos fuimos por la autovía, pasándonos de largo. Lo que buscábamos era el Bloqueo a la pretendida fabrica de Monsanto, pasado el pueblo de Malvinas.

Nada menos que la mayor fabrica de producción de ¿¿?? simulación de semillas y alimentos¿?? de la multinacional tristemente conocida de Monsanto. Muchas recordareis alguna charlita de nuestra chófer, Lucia Maina, sobre esta contundente acción que consiguió la paralización de ese engendro. Tras regresar por la ruta 88-autovía, entramos en el pueblo de Malvinas y literalmente lo cruzamos, pasando por delante de la Escuela del pueblo que es el edificio que quedaría mas cercano a la planta paralizada de Monsanto. De repente, en el lado derecho de la carretera de salida del pueblo, comenzamos a ver las señales del Campamento que lleva adelante el Bloqueo de la pretendida fábrica, las casetas de madera siguen y llegamos a la hipotética entrada, que esta bloqueadísima con neumáticos, barro entre ellos, y unas vistosas banderas rojas y negras, cuasi por igual. Allí, pegadita esta la caseta de recepción y acogida. Nos recibieron atentamente dos personas del campamento que sabían de nuestra llegada por Lucia que el día anterior se lo hizo saber por correo y wasap. Con tranquilidad fuimos charlando, compartiendo el momento de las resistencias y luchas, las nuevas iniciativas para septiembre, todo intercalado de que es Baladre, desde cuando estamos por América, etc. Al cabo de dos horas, salta la alarma de los tiempos, tenemos que salir para el resto de enredos y comer algo antes. Lucia les deja los contactos baladrinos y retomamos el camino de vuelta en esta ocasión a la casa de Laura y Lucia para reponer fuerzas. Durante toda la mañana, como en el día anterior nuestras baladrinas cordobesas no cejaban en golpear las teclas de sus teléfonos mandando wasaps y sms para conseguir una entrevista en la Radio Nacional Argentina, de propiedad pública. Tras tantísimo trabajito, Lichi y Lucia lo han conseguido, con sus duendes de fontaneros.

Tras comer y acopladas al viaje de Laura al centro, llegamos a las instalaciones de la Radio Nacional Argentina, la pública de audiencia y cobertura en todo este extensísimo país. Como suele pasar en estos lugares, nos hacen esperar al momento de entrar en antena. Es uno de los programas de mayor audiencia, que lo guía una mujer sensible y comprometida con la naturaleza y las personas de su país y en general. Nos avisan de que entramos, y allí vamos Juanjo y Manolo, al directo del magazin, más nuestras baladrinas de la ciudad. Con la directora/guía del programa están dos hombres más, que hacen esos tríos que suelen verse en los últimos años en este tipo de programas. Fue media hora a todo pulmón, sin concesiones, con ternura, pero contundentes y claras. Prometen que en días tendremos el audio, para colgarlo o enviarlo al resto del mundo baladrino. Ya sea por listas o página. La verdad, salimos contentas. Juanjo supero el susto de su primer directo y la barba poblada le ayudo a llevar el excesivo rojo de sus mejillas, por los calores que afloraban.

De nuevo regresamos a una casa a descansar unas horas, pero en esta ocasión a la nuestra de adopción (Lichi, Ana, Nadya). Fue llegar y Juanjo y Manolo acorralaron a Lichi para sacar adelante el programa pendiente del Nosotras sobre el grupo E.O. Una hora aclaratoria sobre sus orígenes en el año 2007; momentos, sueños, fracasos, dudas... y deseos, entremezclados con la explicación de como se sitúan muchas de ellas desde miradas baladrinas en su ciudad y país. En la conversación sale por ¿¿?? vez la propuesta de Nano, Javi, Lichi,Yanina, Lucia....de encontrarse en Totoras a lo largo de los próximos meses, antes de un año. Se trata de un encuentro/compartir de baladrinas de este país, que viven con ilusión poner en común los sentires o como diría Josemi y alguna más, como Say : los sentipensares. De repente surgió el recuerdo de la necesidad de llevar los libros que queríamos ceder a la Biblioteca Popular Julio Cortázar del Barrio de S. Vicente. Así que Lucia y Manolo se fueron a realizar el mandado, con prontitud.

De regreso, ya con el tiempo justo, Lucia y Lichi asumían la conducción del coche de Nadya, a gas y nafta, todo un reto. Con puntualidad típica de la gente de E.O. llegamos a la Facultad de Económicas, y con cierta prisita entrabamos en la sala de audiovisuales de esa Facultad a las 19:05h. Casi, sin darnos cuenta, el aula se llenó, hasta los libros los pusimos delante. Esta charla iba a ser diferente, pretendía nuestras compas de E.O. que mostrásemos con sinceridad nuestra mirada a lo que se llama actualmente el Estado Español, sus realidades, luchas y resistencias. A la vez que dar pantallazos sobre la actual U.€.. Esas fueron las primeras demandas con las lógicas preguntas sobre Baladre, su momento, reflexiones y prácticas. Tres horas después Manolo podía dejar de intentar hablar con la garganta enmudecida; mientras Juanjo disfrutaba de la gran venta de libros que se dio al finalizar.

Con mucha complicidad y mimos, nos fuimos ocho personas a cenar juntas, enfrente de la Estación de Colectivos; teníamos una hora y media para todo: cenar, llegar al colectivo y despedirnos. En la mesa estaban cuatro compas de E.O.: tres son de Maldonado y ya reconocemos más, a las que se sumaban Lucia, Lichi y Laura. Durante la cena fuimos conscientes que entraba dentro de lo posible el que algunas NO volviésemos a encontrarnos. Sinceramente la garganta se comenzó constreñir, aparecían nuditos y costaba hablar con soltura. Salimos a pie, tras la cena, para llegar a los andenes de la Estación y meter la maleta de libros en los bajos del Colectivo. Y se dio un momento de calidez y mimos, las llamadas despedidas nos revolvieron toditas, apareciendo cierta sensación de tristeza en el rostro y el cuerpo. Ya sentadas en el Colectivo, a las 23:50 despedíamos por la ventana por última vez a las seis amigas, pero ya sin palabras, conteniendo el desahogo de tanta emoción. Qué duro es dejar a gente tan linda en estas caminatas de la vida.

Juanjo y Manolo cayeron redondos de cansancio y acoplados en unos asientos enormes y comodísimos, tuvieron sus sueños de reencuentro en donde sea con esas gentes y otras muchas, en otro mundo diferente, tantas veces soñado. A las 6:30 con gran puntualidad se encendieron las luces del Colectivo y salieron de sus sueños. Allí estaba delante de sus ojos la Estación de S. Luis, nos vino el recuerdo de dos años atrás llegando al mismo lugar Jessica, Josemi, Lucia, Manolo...

Se presenta un sábado especial, como están siendo todos estos días..., de repente somos conscientes de que Alicia se quedó en Santiago, para superar su bajona puntual de salud, qué rabia.