PREÁMBULO
En toda Europa, la ciudadanía se está uniendo para hacerse con el control de los sistemas alimentarios, desde la producción hasta la distribución y el consumo. Estamos construyendo sistemas basados en nuestras comunidades locales. Estamos unificando nuestros esfuerzos para así alcanzar la soberanía alimentaria, reclamando nuestro derecho a definir nuestros propios sistemas agroalimentarios.
La situación ha madurado lo suficiente como para hablar sobre los terribles efectos del sistema alimentario industrial. La alimentación es demasiado importante como para tratarla como una simple mercancía. El movimiento de la Agricultura Sostenida por la Comunidad (CSA en inglés) proporciona soluciones prácticas e inclusivas para las crisis alimentarias. Somos muchas personas, somos diversas y estamos unidas. Estamos incrementando la solidaridad (haciéndonos responsables) para crear sistemas alimentarios que sean socialmente inclusivos, económicamente viables y sostenibles para el medio ambiente. Cientos de miles de personas en Europa ya hemos demostrado que las CSA funcionan, creando toda una serie de prácticas, redes e iniciativas basadas en valores comunes.
Esta declaración pretende asentar el sustrato común que permita el crecimiento del movimiento CSA, basándose en los documentos y las experiencias existentes.
DEFINICIÓN
La Agricultura Sostenida por la Comunidad (CSA) es una asociación directa basada en la relación personal establecida entre un grupo de personas con una o varias personas productoras, en la que se comparten los riesgos, las responsabilidades y los beneficios mediante un acuerdo vinculante a largo plazo.
PRINCIPIOS RECTORES DE LAS CSA
La CSA no es un modelo estático. Al igual que un huerto, es dinámico: se desarrolla y crece con los cuidados diarios. Cada una de las CSA tiene una autonomía propia.
Asimismo, estamos de acuerdo en que estos son los principios del sustrato común sobre los que puede crecer el movimiento CSA.
- Un cuidado responsable del suelo, el agua, las semillas y otros bienes comunes, a través de los principios de la agroecología y las prácticas recogidas en esta declaración y en la Declaración de Nyeleni de 2015.
- La alimentación como un bien común y no como un bien de consumo.
- Una producción a escala humana enraizada en la realidad y los conocimientos locales.
- Condiciones de trabajo justas y una remuneración decente para todos los participantes.
- Respeto hacia el medio ambiente y el bienestar animal.
- Una alimentación fresca, local, de temporada, sana y variada que sea accesible para todos.
- Una participación activa basada en la confianza, el respeto, la transparencia y la cooperación.
- Apoyo mutuo y solidaridad más allá de las fronteras.
CONSTRUIR- DESARROLLAR-FORTALECER
Queremos construir una fuerte alianza de CSA y de redes de CSA por toda Europa para:
- Fortalecer el movimiento CSA y ayudar a que surjan nuevas CSAs.
- Posibilitar el intercambio de conocimiento y habilidades entre las CSAs de los distintos países.
- Llevar a cabo y promover una investigación participativa en nuestras granjas y en nuestras redes.
- Capacitar y educar a la ciudadanía para que actúe por el movimiento y que lo desarrolle.
- Mostrar al conjunto de la sociedad los beneficios de la CSA.
- Abogar por comunidades CSA a nivel internacional, europeo y local que pongan en práctica nuestros principios.
- Involucrarnos en la gobernanza alimentaria local.
- Trabajar de manera conjunta con el movimiento de la soberanía alimentaria y fortalecer nuestra alianza con los movimientos de economía social y solidaria.
Somos un movimiento de base: creemos que el poder de las CSAs reside en una acción pragmática y cotidiana y en las relaciones personales. Estamos estableciendo una conexión entre nosotras, con las productoras de nuestras comunidades y con la tierra que vive bajo nuestros pies.
Este es nuestro Sustrato Común.
Adoptada en la 3ª Reunión Europea de CSA el 17 de septiembre de 2016 en Ostrava, República Checa